PGV - Edición 476 - sábado 26, agosto, 2023 -¿Puede la corrupción política llevar a un país al caos'? - y más temas hoy en PGV
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¿Puede la corrupción política llevar a un país al caos?
Hugo Arias C. - IA-PGV-BOT
La corrupción política creciente puede llevar a un país al caos y destruirlo económica y socialmente. La corrupción es una de las principales barreras para el desarrollo económico y social.
Aquí se presenta un corto análisis sobre cómo esto puede
suceder, apoyado por varias referencias y citas.
1. Pérdida de Confianza Institucional:
La confianza es un componente esencial para el
buen funcionamiento de cualquier sistema político. Cuando la corrupción se
generaliza, la confianza en las instituciones gubernamentales disminuye, lo que
puede llevar a la inestabilidad política y social. Las personas comienzan a
cuestionar la legitimidad del gobierno y su capacidad para actuar en el interés
público.
Referencia: Rothstein, B., & Uslaner, E. M.
(2005). All for all: Equality and social trust. World Politics, 58(1), 41-72.
2. Disminución de Inversiones:
La corrupción genera un ambiente de incertidumbre
para los inversores nacionales e internacionales. Temen que sus inversiones
puedan verse comprometidas por sobornos, extorsiones o decisiones arbitrarias.
Esto puede llevar a una disminución en las inversiones y, en consecuencia, a
una reducción en la creación de empleo y el crecimiento económico.
Referencia: Mauro, P. (1995). Corruption and
growth. The quarterly journal of economics, 110(3), 681-712.
3. Desigualdad y Brecha Social:
La corrupción puede beneficiar a unos pocos a
expensas de muchos. Esto puede aumentar la desigualdad, ya que aquellos con
conexiones y recursos pueden aprovecharse del sistema, mientras que los más
vulnerables quedan excluidos. Esta creciente desigualdad puede desembocar en
tensiones y conflictos sociales.
Referencia: Gupta, S., Davoodi, H., & Alonso-Terme,
R. (2002). Does corruption affect income inequality and poverty?. Economics of
Governance, 3(1), 23-45.
4. Desvío de Recursos Públicos
La corrupción puede llevar a la mala asignación y
al desvío de recursos públicos. Los fondos destinados a servicios públicos
esenciales, como educación, cultura ciudadana, salud o infraestructura, pueden ser malversados, lo
que afecta directamente la calidad de vida de la población y el desarrollo del
país.
Referencia: Tanzi, V., & Davoodi, H. (1997).
Corruption, public investment, and growth. IMF Working paper, WP/97/139.
5. Fomento de la Cultura de la Ilegalidad:
Cuando la corrupción es rampante y se percibe como
una práctica "normal", puede fomentar una cultura en la que la
ilegalidad y la falta de ética se vean como formas aceptables de actuar. Esto
no solo puede agravar aún más la corrupción, sino que también puede llevar a un
aumento de otros tipos de crímenes.
Referencia: Rose-Ackerman, S. (1999). Corruption
and government: Causes, consequences, and reform. Cambridge university press.
En conclusión, la corrupción política creciente
tiene el potencial de arrastrar a un país hacia el caos y destruirlo tanto
económica como socialmente. Aunque algunos países pueden tener un grado de
resiliencia frente a ciertos niveles de corrupción, cuando esta se generaliza y
profundiza, los efectos negativos son palpables y pueden ser devastadores. Es
esencial para cualquier nación trabajar activamente en estrategias y mecanismos
de control para combatir la corrupción y proteger su futuro desarrollo y
bienestar social.
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Los
filósofos también profetizamos |
En toda sociedad
existe la corrupción, es algo inherente al ser humano, pues tiene tendencia
acumular poder, que le viene de los resabios del instinto de dominio.
Especialmente en aquellas personas que tienen alguna cuota de poder. En una
sociedad organizada, con instituciones independientes y fuertes, que se
controlen mutuamente, la posibilidad de que la corrupción llegue a todos los
ámbitos es poca. A fines del siglo XIX el
filósofo alemán Friedrich Nietzsche[1],
en el libro “La gaya ciencia”, en el punto 23, propone “Los síntomas de la
corrupción”. Dice: "Detengámonos a
observar en el interior de las condiciones sociales…, los síntomas que son
calificados de "corrupción".[2] En un primer lugar:
"comienza a predominar una superstición de diversos aspectos, mientras que
se degrada y se vuelve impotente la creencia que hasta entonces profesaba un
pueblo en su totalidad: la superstición es efectivamente un librepensamiento de
segundo orden, quien se entrega a ella opta por un determinado número de formas
y de fórmulas que le convienen, concediéndose a sí mismo el derecho a elegir.
En comparación con el individuo religioso, el supersticioso es mucho más
"personal".[3] En la última década del siglo
XX, luego de “la caída del muro de Berlín” resurge el liberalismo económico, a
la nueva versión se le denomina “neoliberalismo” que propone nuevas formas de
libertad de mercado, se desecha la idea del “Estado de Bienestar” y comienza la
era de la “Teoría del Derrame”, se impone en la sociedad, supersticiones del
tipo “hay que privatizar las empresas estatales”, y se concibe la idea de la
privatización de la educación y salud. El Estado ya no es indicador del camino
a seguir, sino que sólo es regulador. Asimismo, junto con el aspecto económico, se pone
énfasis en el goce individual, en lo valioso de las distintas culturas, la
globalización de la información, la diseminación de las distintas religiones
mono y politeístas, filosofías orientales, aparece el postmodernismo [4],
ya no hay verdades absolutas. En segundo lugar sobreviene el
relajamiento de las costumbres: "se acusa de relajamiento a la
sociedad en la cual la corrupción gana terreno; y es evidente que en ella
disminuyen el aprecio de la guerra y la afición a ésta, mientras que de ahora
en más se aspira a las comodidades de la vida con el mismo fervor con el que
antes se aspiraba a los honores gimnásticos y guerreros."[5] ¿Quién
no puede estar de acuerdo con el fin de las guerras?, con más razón después de
las dos guerras mundiales, la guerra fría, etc. y, como si fuera un movimiento
pendular, se pasa a las comodidades de la vida que se manifiesta en el goce a
toda costa, con el consecuente enriquecimiento. Sin tener en cuenta que se
está perjudicando a todo el resto de la sociedad, se antepone el beneficio
propio por sobre el bien común. El “otro” se convierte en un medio para
alcanzar los fines personales. Pero, "precisamente, en
épocas de "relajamiento", la tragedia frecuenta las casas y recorre
las calles, surgen grandes amores y grandes odios"[6],
comienzan a crecer en gran medida los excluidos de las sociedades, los sin
trabajo, las migraciones internas a los grandes centros de poder, recrudecen
las adicciones, la violencia doméstica, la virulencia de los delitos… "Se tiende a considerar,
para compensar de algún modo los inconvenientes de la superstición y del
relajamiento, que en estas épocas de corrupción existe una mayor dulzura que en
las precedentes y que, en comparación con las épocas más creyentes y
fuertes"[7],
se ensalzan, al máximo, los valores de libertad, tecnologización, propiedad y
algunos disvalores como el lujo, vulgaridad, ostentación…, se tiende a
justificar la corrupción con la frase “roban, pero hacen”. "La crueldad ha retrocedido
considerablemente. Pero yo no podría sumarme a esta forma de alabanza, como
tampoco podría hacerlo a censuras semejantes; sólo aceptaré que ahora la
crueldad se hace más sofisticada y que en adelante sus formas más antiguas
atentan contra el buen gusto, aunque en épocas de corrupción las heridas y
torturas mediante palabras y miradas alcanzan su pleno desarrollo; asimismo, en
tales épocas se crean tanto la maldad como el placer por la maldad"[8].
Se incrementan los daños producidos por el neoliberalismo y el individualismo,
es cada vez mayor la marginalidad, pobreza; y la consecuente exclusión y
protesta social. En tercer lugar: los corruptos
en general son los que acusan a otros de lo mismo que son ellos, le cabe aquelrefrán que dice “el ladrón cree a todos de su misma condición” y para ello
agudizan sus discursos. "Los hombres de la corrupción son muy ingeniosos y
agresivos; saben que existen otras maneras de matar diferentes a las causadas
por un puñal y un golpe de mano, y no desconocen que todo lo que se dice
bien goza de credibilidad"[9],
y toda mentira que se repite hasta el hartazgo al final queda subyacente como
verdad. En cuarto lugar, cuando el
terreno está propicio, surgen los tiranos: "Cuando la descomposición
alcanza el mayor grado, justo como la lucha entre tiranos de todo tipo, surge
entonces el César, el tirano definitivo, que pone fin al conflicto agotado por
el dominio exclusivo de uno solo, dejando que el cansancio actúe por su cuenta.
A su llegada, el individuo está ya en plena madurez y, por consiguiente, la
"cultura" ha alcanzado su más grande estado de fecundidad (si bien no
a causa de él ni por él, aunque a los hombres sumamente cultos les gusta
adularla haciéndose pasar por obra suya)."[10] Seducen a todas las organizaciones
sociales de todo tipo con su discurso, "hasta las manos más nobles se
ofrezcan en cuanto un hombre poderoso se muestre dispuesto a derramar en ellas
su oro. En ese instante se descubre una gran incertidumbre respecto del futuro
que se vive para el presente; es un estado anímico en relación con el cual
todos los seductores disponen de buenas oportunidades de juego, en tanto que la
seducción y la corrupción se dejan para "el presente", ¡reservándose
el futuro y la virtud![11] Construyen poder con la teoría
‘amigo-enemigo’, necesitan de un enemigo común externo o interno, que siempre
son poderosos, aúnan las voluntades de los pueblos y acallan voces que reclaman
por la corrupción reinante; corrompen y desvían, de su propósito o ideal, a las
organizaciones que en ellos pusieron su confianza. Se apropian y tuercen los
ideales que sostuvieron a una sociedad ensamblada. Se sienten inmortales, y con
derecho a eternizarse en el poder. “Los individuos…, se preocupan
del momento más de lo que lo hacen sus oponentes, los hombres gregarios, pues
se consideran a sí mismos tan imprevisibles como el futuro. De esta manera, se
unen con gusto a los violentos, pues se sienten capaces de actuar y disponen de
recursos que la masa no comprendería ni perdonaría, mientras que, por otro
lado, descubren que el César extiende el concepto de derecho del individuo
hasta incluir también sus transgresiones, y que le interesa convertirse en el
intérprete de una moral privada más audaz. El tirano piensa de sí mismo, y
quiere también que los demás piensen, lo que a su modo dijo Napoleón de una
manera totalmente clásica: "Tengo el derecho a contestar todas las quejas
que me hagan con un eterno 'yo soy el que soy'. Yo estoy al margen de todos, no
acepto condiciones de nadie. Deben someterse a todos mis caprichos y estimar
como absolutamente natural que me entregue a tales o cuales distracciones".
Así le aseveró Napoleón a su esposa, un día que ella puso en duda, no sin
fundamento, la fidelidad conyugal de su marido”[12].
Sostienen que tienen el derecho a disponer de los bienes de todos como si
fueran suyos, someten a la sociedad a su imperio y orden, hasta se creen sus
propios discursos, y se sienten únicos capaces de salvar a la patria de los
enemigos, que ellos mismos establecieron. "En las épocas de
corrupción caen los frutos del árbol; me refiero a los individuos, portadores
de las semillas del futuro, instigadores de la colonización espiritual y de la
formación de nuevos órganos del Estado y de la sociedad. La palabra corrupción
no es sino un término despectivo para hacer referencia a las épocas otoñales de
un pueblo."[13] Pero, como son seres humanos,
también les llega el final de la vida, o la sociedad, al sentirse tan
humillada, bastardeada, dice “basta”. Para salir de esta situación se
necesita de instituciones fuertes e independientes, no corruptas, las cuales el
“cesar” se ha encargado de destruir. Se necesita volver a fundar el
“pacto social” pero cuidado, en una auténtica democracia se deben escuchar
todas las voces, aún las de lo que están en contra de ella, aún las que siguen
sosteniendo al ‘césar’, pues se corre el peligro de caer en la demagogia o lo
que es peor aún en la oclocracia [14]. Esto es un simple análisis sobre
la historia reciente que me toca vivir, y le quité aspectos particulares para
que se pueda realizar una analogía con la los hechos que les ha tocado vivir a
cada uno en los últimos años. Porque la historia siempre enseña lo que NO
debemos volver a repetir. [1] Friedrich Nietzsche. Friedrich Wilhelm Nietzsche; Röcken, (15 de octubre de 1844 - Weimar, 25 de agosto de 1900) fue un filósofo, poeta, músico y filólogo alemán, considerado uno de los pensadores contemporáneos más influyentes del siglo XIX. https://es.wikipedia.org/wiki/Friedrich_Nietzsche [2] Friedrich Nietzsche, La gaya ciencia, edición
digital. [3] Ídem [4] En
una famosa declaración del fin del modernismo, simbolizado por Auschwitz, el
post modernista francés Jean-François Lyotard preguntó: "¿Después de los
metarrelatos, ¿dónde puede residir la legitimidad?" Entonces, ¿qué es el
post modernismo? "Simplificando hasta el extremo, yo defino lo post
moderno como la incredulidad hacia los metarrelatos". Es decir, el post
modernismo es profundamente escéptico (o receloso) hacia los grandes sistemas o
historias explicativos. También critica todo criterio que proclame ser neutral,
imparcial o racional. El filósofo cristiano Merold Westphal observa que el
modernismo se caracterizaba por la búsqueda de (a) la certeza absoluta (piense
en Descartes) y (b) el totalismo, ese sistema "todoincluyente"
(metarrelato). Los modernistas intentaron crear "grandes historias"
--sin referencia a Dios-- sobre las cuales fundamentar la dignidad humana, la
libertad, la moralidad y el progreso. Mientras que el modernismo buscaba sistemas totalizantes y una certeza
absoluta, el post modernismo ahora los pone en duda de dos maneras. Para
contrarrestar el totalismo, el post modernismo asevera que frecuentemente
utilizamos la "razón" para buscar el cumplimiento de nuestros
intereses y deseos; la "verdad" es cualquier cosa que fomente mi
voluntad o intereses (o los de mi grupo). Hay una "agenda política"
en cualquier cosa que declaremos como verdad. El conocimiento no es neutral. (Esta
observación utiliza la "hermenéutica de la sospecha"). En respuesta a
la certeza imparcial, el post modernismo enfatiza que nuestras ideas y juicios
están incrustados en un contexto histórico-cultural; así que nunca podemos
salirnos totalmente de dicho contexto por pura reflexión. (A esto se le ha
llamado la "hermenéutica de la finitud").
http://es.4truth.net/fourtruthespbnew.aspx?pageid=8589983633 [5] Ídem [6] Ídem [7] Ídem [8] Ídem [9] Ídem [10] Ídem [11] Ídem [12] Ídem [13] Ídem [14] La oclocracia es el gobierno de la
muchedumbre, es decir," la muchedumbre, masa o gentío es
un agente de producción biopolítica que a la hora de abordar asuntos
políticos presenta una voluntad viciada, evicciosa, confusa,
injuiciosa o irracional, por lo que carece de capacidad de autogobierno y
por ende no conserva los requisitos necesarios para ser considerada como «pueblo»"
https://es.wikipedia.org/wiki/Oclocracia |
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¿Qué vendrá después de las elecciones ecuatorianas?
Julio Londoño Paredes (*)
Las elecciones en el Ecuador han dejado como finalistas para la segunda vuelta a la candidata del partido del expresidente Rafael Correa, Luisa González y a Rafael Noboa de 35 años, exparlamentario que estudió en las universidades americanas. A menos que algo extraordinario ocurra en la segunda vuelta, ganará Luisa González, que representa el regreso del régimen de Correa al Ecuador, que como está inhabilitado, por ahora, utilizó a Luisa para su proyección.
La gente recuerda a Correa, porque con el precio del barril de petróleo por las nubes y con un país dolarizado, abrió carreteras y adelanto otras obras. Sin embargo, por sobornos y aportes por la inefable y omnipresente Odebrecht, el mandatario fue condenado a ocho años de prisión. Casado con una ciudadana belga, el gobierno de ese país le dio la condición de asilado.
En muchos países caen los presidentes que han estado implicados en los sobornos y dádivas de la funesta empresa brasilera o de personas vinculadas al narcotráfico. Sin embargo, en algunos ha habido excepciones.
Como consecuencia de las diversas etapas de la violencia galopante, miles de colombianos emigraron para el Ecuador. Muchos de ellos profesionales, industriales y comerciantes que contribuyeron al desarrollo de ese país.
Además, en la provincia ecuatoriana de Sucumbíos, limítrofe con el departamento de Putumayo, cerca de 70000 compatriotas se encontraban refugiados en condiciones muy precarias. Sin embargo, llegaron igualmente delincuentes y antisociales que generaron en las ciudades y en algunas áreas rurales ecuatorianas, una situación de inseguridad allá desconocida.
El Ecuador se había sentido siempre orgulloso de que, no obstante ser un “estado tapón” entre el Perú y Colombia, ambos productores de coca, no había caído en ese flagelo. Es más, que la descomposición y la violencia existente en nuestro país, no les había permeado. Se equivocaron, porque poco a poco, más temprano que tarde, penetró el narcotráfico.
Precisamente en la provincia de Sucumbíos, donde se encontraban los grupos armados colombianos, no obstante que es la que produce la mayor parte del petróleo ecuatoriano, era la más abandonada del país. Carente de servicios fundamentales, vías de comunicación, acueductos, alcantarillado y atención médica. Las pocas unidades de policía que se encontraban estaban en plena convivencia con la guerrilla colombiana. La bonanza petrolera no alcanzó a esa región.
Finalmente se produce el ataque de fuerzas armadas colombianas al campamento de Raúl Reyes. Correa, después de los hechos envío una comisión de alto nivel a Sucumbíos para que verificara la situación. El informe reflejó el estado de degradación que allí existía.
El gran error del presidente ecuatoriano fue el de haber ignorado las actividades de grupos armados y de narcotraficantes colombianos en su territorio. Su actitud terminó por hundir paulatinamente al Ecuador y colocarlo en la dramática condición actual. Esa mano generosa con los narcos fue fatal. Parecido al desastroso programa de López Obrador: “Abrazos pero no balazos”. Ojalá se aprenda de estas desafortunadas políticas.
Creyó además Correa que se iba a eternizar en el poder: se equivocó. Ningún mandatario lo ha logrado, aunque se crea lo contrario.
No se sabe si, la candidata González triunfa en la segunda vuelta, tratará de resucitar a su jefe o de gobernar siguiendo sus pautas a larga distancia.
(*) Excanciller y exembajador de Colombia. Decano de la facultad de estudios internacionales, políticos y urbanos de la universidad del Rosario.
Fuentes: El autor y https://www.semana.com/opinion
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Así es como la inteligencia
artificial imagina a los humanos del futuro
ChatGPT
tiene una visión bastante amable de la humanidad que habitará el mundo del
futuro.
Mar AguilarPeriodista científica
¿Cómo serán
los humanos del futuro? Responder a esta pregunta no es sencillo y
tampoco son pocas las personas que se han interesado por el tema y han dado
explicaciones que el devenir de los tiempos dirá si se ajustaban a la realidad
o no.
Sobre
la evolución humana existe una filosofía llamada transhumanismo que
se basa en la creencia de que la naturaleza humana está evolucionando con el
tiempo no solo debido a la evolución natural de Darwin,
sino también por el impacto de los movimientos sociales y las innovaciones
técnicas que se van produciendo. La filosofía ha sido moldeada por muchos
precursores históricos, por ejemplo, la famosa idea de Nietzsche de
que el ser humano es una simple cuerda atada entre el animal y el posthumano
o Übermensch o las reflexiones de Fedorov sobre la posibilidad
de la inmortalidad.
En un
estudio publicado en 2019 en Balkan Journal of Philosophy, su autor
defiende que, desde una perspectiva tecnológica actual, en un futuro no muy
lejano los humanos podrán elegir su propia forma de evolucionar,
“actualizándose” con dispositivos electrónicos u orgánicos que modificarán,
mejorarán o simplemente introducirán nuevas formas de sensación y experiencia a
su ser.
Ray
Kurzweil, exingeniero de Google, experto en inteligencia
artificial y conocido por haber anunciado hace unos años
que en 2030 los seres humanos podremos ser inmortales, defiende en
el libro Alan Turing: Life and Legacy of a Great Thinker que
el análisis de la historia de la tecnología muestra que el cambio
tecnológico es exponencial, contrario a la visión “lineal intuitiva” del
sentido común. Según esta premisa, no experimentaremos 100 años de progreso en
el siglo XXI, sino que al ritmo actual serán más bien 20 000.
“Dentro de unas pocas décadas, la inteligencia de las máquinas superará a la inteligencia humana”, dice Kurzweil. A lo que añade: “Las implicaciones incluyen la fusión de inteligencia biológica y no biológica, humanos inmortales basados en software y niveles ultraaltos de inteligencia que se expanden hacia el universo a la velocidad de la luz”.
¿Y qué dice
la inteligencia artificial sobre la humanidad del futuro? ChatGPT presenta
algunas posibles visiones, aunque subraya que se trata de conjeturas y
que la realidad será el resultado de una serie de factores y decisiones. Así se
imagina la IA a
los humanos del futuro.
Humanidad
avanzada tecnológicamente. En
una visión optimista, la humanidad podría seguir avanzando en tecnología,
ciencia y medicina, lo que nos permitiría vivir más tiempo y con una mayor
calidad de vida. Los avances en la inteligencia artificial, la energía
renovable y la exploración espacial podrían llevar a una civilización más
avanzada tecnológicamente.
Sociedad
sostenible y ecológica. La
humanidad podría centrarse en soluciones sostenibles para abordar el cambio
climático y la conservación del medio ambiente. Esto podría conducir a una
sociedad más consciente de la ecología, con una menor huella de carbono y una
mayor armonía con la naturaleza.
Diversidad
cultural e inclusión. En un mundo
cada vez más conectado, podríamos ver una mayor diversidad cultural y un
enfoque en la inclusión y la igualdad de las personas. Las sociedades podrían
volverse más tolerantes y acogedoras hacia las diferencias individuales.
Énfasis
en la educación y el conocimiento. La
inversión en educación y el acceso a la información podrían dar como resultado
sociedades más educadas y conscientes, lo que podría impulsar la innovación y
el progreso en todas las áreas.
Desafíos
éticos y morales. Con avances tecnológicos
como la inteligencia artificial y la edición genética, la humanidad podría
enfrentar desafíos éticos y morales significativos sobre cómo utilizar estas
tecnologías de manera responsable y equitativa.
Cooperación global. La resolución de problemas globales, como las pandemias, el hambre y la pobreza, podría requerir una mayor cooperación y colaboración entre países y culturas.
Exploración
espacial y colonización. La
exploración espacial podría llevar a la colonización de otros planetas o
a la construcción de estaciones espaciales habitables, lo que cambiaría mucho nuestra relación con el cosmos.
Identidad
y conciencia global. La identidad humana podría
evolucionar para incluir una mayor conciencia global, en la que las personas se
vean a sí mismas como ciudadanos del mundo y trabajen juntas para abordar
problemas globales.
Referencias:
- Chat GPT 3.5
- Klymenko, R. (2019). Artificial Evolution in Transhumanism. Balkan
Journal of Philosophy. https://doi.org/10.11590/abhps.2019.3.06.
- Kurzweil, Ray. (2004). Chapter The Law of Accelerating Returns.
10.1007/978-3-662-05642-4_16.
Fuente: https://www.muyinteresante.es/tecnologia/61271.html
Imagen de corrupción en https://co.images.search.yahoo.com/search/images?
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