PGV - Edición 467 - miércoles, 26, julio, 2023 - ¿El odio y la mentira destruyen la democracia en un país? - y más temas hoy en PGV
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todos pereceremos!!
¿El odio y la mentira destruyen la democracia en un país?
Por Hugo Arias Castellanos - IA-PGV-BOT
El odio y la mentira pueden
fomentar la división entre diferentes grupos demográficos dentro de una
sociedad, minando así la cohesión social necesaria para mantener una democracia
saludable. El Dr. Robert Putnam, en su estudio "E Pluribus Unum: Diversity
and Community in the Twenty-first Century" (2007), muestra cómo la
diversidad y la desconfianza pueden debilitar la cohesión social, lo que puede
hacer que una democracia sea menos efectiva y, eventualmente, se derrumbe [^1^].
Fuentes:
[^1^]: Putnam, R. D. (2007). E Pluribus Unum: Diversity and Community in the Twenty-first Century. Scandinavian Political Studies, 30(2), 137–174.
[^2^]: Reifler, J. (2017). The Effects of Fact Checking Threat: Results from a Field Experiment in the States. Statistics and Public Policy, 4(1), 1–10.
[^3^]: Benkler, Y., Faris, R., & Roberts, H. (2018). Network Propaganda: Manipulation, Disinformation, and Radicalization in American Politics. Oxford University Press.
*****
Cuando ganar es perder
Por Eduardo Barajas Sandoval (*)
25 de julio de 2023
Millones de españoles se movilizaron en el sopor del verano más caliente de los últimos años a votar en unas elecciones en medio de un clima político lo mismo de candente.
El ejercicio electoral, convocado por el presidente socialista del gobierno en medio de un ambiente de descontento muy propio de nuestra época, parecía hace unas semanas conducir a un cambio nítido del apoyo político en favor del centro derecha, representado en el Partido Popular.
Los comicios, como es el caso en muchas partes, y como ha sido particularmente en España en los últimos tiempos, no produjeron un ganador de verdad. De manera que no hay una formación política, con mayoría suficiente en el parlamento, para gobernar sin necesidad de entrar en alianzas con otros partidos.
Una vez más se ha frustrado el ideal de desarrollar un programa propio, conforme a un credo político determinado, sin necesidad de hacer concesiones a partidos pequeños que, a pesar de los pocos escaños conseguidos se convierten en “hacedores de gobiernos” y cobran el apoyo con cuotas de poder representadas en ministerios.
Los conservadores del Partido Popular obtuvieron el mayor número de votos y de curules en el legislativo, pero se quedaron cortos y no podrían gobernar por su cuenta. De manera que su triunfo sabe a derrota, en especial porque se esperaba que la inercia del proceso político les condujera a una clara victoria contra un gobierno desgastado por múltiples factores.
Por el lado de los socialistas, la derrota, entendida como tal por el simple hecho de haber obtenido el segundo lugar en votos y en curules, tuvo en cambio un sabor a victoria. Ellos mismos no sospechaban la posible obtención de un apoyo popular que creían desvanecido por el desgaste natural de los gobiernos y la incisiva campaña de la derecha.
Conforme a la lógica del sistema parlamentario, ante la obligación política de intentar formar un gobierno, en lugar de ir de inmediato a nuevas elecciones, los partidos pequeños, que representan causas radicales, desde los extremos del espectro político, cuando no proyectos regionalistas o separatistas, se convierten en protagonistas principales. Así será, sin que hayan obtenido una votación significativa. Realidad que permite por otra parte conlleva el beneficio de la representatividad de las minorías y su vocación de poder.
En el fondo de la controversia política del momento se observa la preocupación ciudadana por la precariedad de la respuesta del estado a los problemas de la vida cotidiana. Respuesta cada vez más alejada de la posibilidad de atender a inquietudes elementales.
El resultado mismo de los comicios demuestra que ninguna propuesta responde de manera contundentemente atractiva, como para que un electorado de opinión se decida por apoyar claramente uno u otro proyecto.
Dentro del ritual de búsqueda de alianzas que permitirían formar un gobierno de coalición, el primer turno correspondería a Alberto Núñez Feijóo, jefe del Partido Popular, porque obtuvo el mayor número de votos. En su alocución después de conocidos los resultados de las votaciones, no trató para nada el fondo de sus propuestas, como si ello fuera apenas asunto de una campaña ya terminada. Simplemente reivindicó la opción de formar gobierno y anunció estar dispuesto a negociar con quien fuese.
El problema para el líder conservador radica en que las formaciones de derecha, incluyendo la radical de Vox, que para muchos revive fantasmas del pasado, no alcanzarían a sumar curules suficientes para armar una mayoría en Las Cortes tal como están las cosas. Faltarían 7 curules. De manera que, para ser serios y buscar opciones verdaderas de poder, el PP tendría que pasar la vergüenza política de llamar a la puerta de algún partido de izquierda, para rogarle que le ayude a formar un gobierno, vaya uno a saber el precio, y la voluntad que pudiera tener alguno de ellos de apoyar un gobierno de derecha. Gobierno que llevaría para todos la fragilidad de un pecado original fácilmente denunciable por propios y extraños.
Como lo más posible es que, bajo ninguna modalidad de alianza, la derecha sea capaz de armar gobierno, el turno les correspondería otra vez a los socialistas del PSOE, como segunda formación política en el acopio de votos. Pero las cosas no serían tan fáciles, aunque, sumando, en ese caso sí existiría teóricamente una posibilidad de armar de nuevo un gobierno, muy parecido al que acaba de terminar con las elecciones en pleno verano.
El problema para los socialistas, con Pedro Sánchez a la cabeza, es que, después de la euforia por no haberse desplomado con motivo de los comicios, como muchos vaticinaban, tendría que ver qué tanto deben ceder ante las pretensiones de partidos nacionalistas, contradictores de la unidad misma de España. Formaciones que, en el País Vasco y Cataluña, desde una minoría ostensible en el plano nacional, terminarían por jugar papel definitivo a la hora de gobernar el país, con una fuerte cuota de poder, si saben negociar conforme a sus intereses.
Ahí estaría España, una vez más, ante la imposibilidad de tener un gobierno con mandato claro. Podría decirse que eso sería responsabilidad de la propia ciudadanía, en cuyas manos estaría decidir de manera más clara entre las opciones políticas disponibles.
Pero, mucho más al fondo, ahí está una nueva demostración de que en el mundo democrático existe una especie de insuficiencia, cuando no de esterilidad política de ideas y propuestas adecuadas a las necesidades de millones de personas que esperan la acción del estado en su favor, o al menos una actuación que sirva de marco a la iniciativa privada, para que la gente sea protagonista de su propio destino.
Ese drama de la insuficiencia política, que hace que los ganadores de elecciones terminen por ser perdedores, y que los perdedores se salgan con la suya, sostenidos por unos pequeños que se la juegan a servir de comodines, no deja de afectar la confianza en un sistema que, como dijo Churchill, sería el menos peor entre los disponibles.
Los estudiosos de las relaciones de la política con la economía y de las necesidades de la sociedad, los actores políticos, y las organizaciones ciudadanas de toda índole, siguen entonces con una tarea pendiente.
Mientras tanto, España podría volver a un gobierno de retazos, como el que ha tenido últimamente, o se vería obligada a acudir otra vez a las urnas, con el alto riesgo de que pase exactamente lo mismo que acaba de suceder. Salvo que un contingente de nuevos votantes pueda marcar la diferencia, o que aparezca algún factor cautivante que modifique las preferencias actuales. Con los riesgos propios de la euforia del inmediatismo, y de la esperanza desaforada en salvadores.
Esto sucedería si la Tierra
dejara de girar repentinamente ¿Sería el fin de la humanidad?
Historia de
Andrés Felipe Barrera • 24, julio, 2023
Esto sucedería si la Tierra dejara de girar repentinamente ¿Sería el fin
de la humanidad?© Proporcionado por Radio Caracol
La rotación de la Tierra, aunque no parece tan
importante, es primordial para mantener la vida en la Tierra, ya que
es la razón de mantener todos los gases que produce la atmósfera, el oxígeno y
el solo hecho que se detenga por completo de la nada, ocasionaría cambios
determinantes para la raza humana y demás especies que conviven en el planeta.
El movimiento de rotación de la Tierra es de oriente a occidente cada 24 horas, iluminando
cada lado por al menos 12 horas. Esto es bastante relevante, ya que así se
regula la temperatura del globo terráqueo y la vida se desarrolla de una manera
adecuada. Por esta razón, le contamos qué sucedería si la tierra se detiene.
¿Qué pasaría si la tierra se detiene?
Expertos de la NASA afirmaron en la revista de National Geographic que lo primero que el ser humano sentiría si la Tierra de repente dejara de girar, es algo muy similar al choque de automóvil, solo que a una velocidad mil veces mayor, literalmente saldría disparado del lugar donde se encuentre.
Hay que tener en cuenta que no solo las personas
saldrían volando, sino todos los objetos, seres vivos y demás presentes en el
planeta, se llega a especular que la fuerza de frenado sería tan abrupta, que
incluso los edificios, montañas y océanos se desprenderían de su punto.
Los científicos explicaron que esto se debe a la
velocidad que tiene la Tierra en su estado de rotación, es de aproximadamente
1770 kilómetros por hora, razón por la que un frenado en seco detendría la masa
del planeta, pero los objetos presentes en la misma mantendrían la misma
velocidad por un momento hacia la atmósfera, para luego volver a la superficie.
¿Esto provocaría el fin del mundo?
Los expertos aseguraron que se trata de un escenario bastante apocalíptico, en donde
probablemente ningún ser vivo pueda sobrevivir por la fuerza del impacto, desde
que salen disparados hasta que vuelven a caer. También se incluyen animales y
demás especies presentes en el territorio.
Además, el detenimiento de repente del planeta,
provocaría huranaces, terremotos, maremotos, además que hay que tener en cuenta
los objetos volátiles, plantas nucleares y demás infraestructura que saldría
perjudicada con esto.
Por otra parte, está el hecho de la noche y el día,
ya que si se detiene la Tierra, un lado quedaría de noche por más o menos 6
meses, ocasionando temperaturas heladas y al otro costado un clima
extremadamente caliente, por lo cual todo estaría mal en una situación como estas. Sin
embargo, según científicos, esto es bastante improbable y no hay razones por
las cuales sucedería esto.
Fuente: Esto
sucedería si la Tierra dejara de girar repentinamente ¿Sería el fin de la
humanidad? (msn.com)
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Esta es la historia de Bharat Jain, el mendigo más rico de la India
Historia de Sophia Salamanca Gomez • 23, julio, 2023
.© Proporcionado por El Tiempo
Aunque sus familiares le piden
que renuncie a mendigar, quiere continuar su vida en las calles.
En la bulliciosa ciudad de
Mumbai, India,
una historia extraordinaria ha cautivado la atención del mundo entero. Se trata
de Bharat Jain, un hombre que ha desafiado los estereotipos y se ha
convertido en el mendigo más rico del planeta.
Bharat Jain es conocido en todo el mundo por mendigar en las
concurridas calles de Mumbai, específicamente en lugares como la estación de
trenes de Chhatrapati Shivaji Maharaj Terminus y el Azad Maidan.
Aparentemente, su humilde forma
de vida le ha permitido amasar una fortuna inimaginable: se estima que posee
una riqueza de aproximadamente un millón de dólares estadounidenses,
casi cuatro mil millones de pesos colombianos.
Según informan los medios
locales, Bharat obtiene ingresos diarios que oscilan entre 2.000 y
2.500 rupias, que en moneda colombiana serían entre 100 mil y 120 mil
pesos, casi un millón a la semana.
Esta suma parece ser
extremadamente lucrativa, ya que sus ingresos mensuales alcanzan entre
60.000 y 75.000 rupias, es decir, entre casi tres millones y tres millones
600 mil pesos.
También sería dueño de tres
propiedades: un apartamento en Bombay valorado en 1.2 millones de rupias,
alrededor de 58 millones de pesos colombianos, y dos locales comerciales en
Thane que se alquilan por 30.000 rupias, es decir, casi un millón 500 mil pesos
mensuales.
A pesar de su impresionante fortuna, este hombre sigue pidiendo limosna en las calles de Mumbai, un gesto que sorprende a muchos y despierta la curiosidad del mundo.
Aunque sus familiares le piden
que renuncie a mendigar, ya que ellos mismos han alcanzado estabilidad con
negocios prósperos, Jain permanece firme en su elección de continuar su
vida en las calles.
SOPHIA SALAMANCA GÓMEZ
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO
Fuente: Esta
es la historia de Bharat Jain, el mendigo más rico de la India (msn.com)
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Si tienes miedo de haberme dado pocas caricias, debes saber que no he olvidado ni siquiera una.
El conmovedor poema de Emanuele Grandi dedicado a nuestros amigos de cuatro patas.
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