PGV - Edición 462 - sábado, 8, julio, 2023 - "Los bienes materiales deben ser conquistados por cada uno, no te dediques a acumular herencia." - y más temas hoy en PGV
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todos pereceremos!!
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¿Son realmente viables el uso óptimo de los factores de la producción y la distribución justa del resultado del proceso productivo en un país?
Por Hugo Arias Castellanos con IA-PGV-BOT
El uso óptimo de los factores de la producción (incluyendo
los recursos públicos en todos los niveles de gestión) se refiere a la
asignación eficiente y efectiva de los recursos disponibles, como la tierra, el
trabajo, el capital y la tecnología, con el objetivo de maximizar la
productividad y el rendimiento económico.
La distribución justa del resultado del proceso productivo se
refiere a garantizar que los beneficios económicos generados por la producción
se repartan de manera justa y equilibrada entre los diferentes actores de la
sociedad. Esto implica abordar la desigualdad de ingresos y promover la
inclusión social.
El uso óptimo de los factores de la producción (incluyendo
los recursos públicos en todos los niveles de gestión) y la distribución
justa del resultado del proceso productivo son objetivos deseables en cualquier
país y que debieran asumirse como políticas de Estado en todo país viable. Sin embargo, la viabilidad de lograr tan determinantes objetivos depende de una serie de factores
contextuales, institucionales y políticos.
A continuación, se analizará la viabilidad de estos
objetivos, considerando diferentes perspectivas.
El uso óptimo de los factores de la producción
implica maximizar la eficiencia y productividad de los recursos disponibles en
una economía. Esto implica asignar de manera adecuada y eficiente los factores
de producción, como la tierra, el trabajo, el capital y la tecnología, para
obtener el máximo rendimiento. Si bien un uso óptimo de estos factores puede
generar crecimiento económico y desarrollo, su viabilidad depende de varios
factores.
En primer lugar, la viabilidad del uso óptimo de
los factores de producción está estrechamente relacionada con el entorno
institucional y político de un país. Un marco regulatorio sólido, la protección
de los derechos de propiedad, la estabilidad política y la ausencia de
corrupción son elementos fundamentales para fomentar un entorno propicio para
un uso óptimo de los factores de producción. Sin embargo, en muchos países, la
falta de instituciones sólidas y la corrupción obstaculizan la eficiencia en la
asignación de recursos.
Además, la viabilidad del uso óptimo de los
factores de producción también está condicionada por la disponibilidad y
calidad de los recursos. Por ejemplo, la falta de infraestructuras adecuadas, la
escasez de capital humano debidamente capacitado y la limitada tecnología
pueden limitar la capacidad de un país para utilizar de manera óptima sus
factores de producción.
En cuanto a la distribución justa del resultado
del proceso productivo, este objetivo busca garantizar que los beneficios
económicos generados se repartan de manera justa y equilibrada entre los diferentes
actores de la sociedad. Si bien es una meta socialmente deseable, su viabilidad
también está sujeta a varios factores.
La distribución justa del resultado del proceso
productivo requiere de políticas y mecanismos adecuados, como la implementación
de sistemas de protección social, impuestos progresivos, políticas de empleo
inclusivas, la formación pertinente, continuada y resiliente de la fuerza de
trabajo y la promoción de la igualdad de oportunidades. Sin embargo, la
viabilidad de estas medidas puede verse afectada por diversos factores, como la
capacidad financiera del Estado, la resistencia de ciertos grupos de interés,
la desigualdad de poder y la falta de consenso político.
Es importante destacar que la viabilidad del uso
óptimo de los factores de producción y la distribución justa del resultado del
proceso productivo puede variar significativamente de un país a otro. Cada país
tiene su propio contexto económico, social y político, lo que implica que las
soluciones y enfoques deben adaptarse a esas realidades específicas.
En resumen, el uso óptimo de los factores de
producción y la distribución justa del resultado del proceso productivo son
metas deseables en cualquier país. Sin embargo, su viabilidad está influenciada
por diversos factores contextuales, institucionales y políticos. El contexto
económico, la calidad de la gobernanza, la disponibilidad de recursos y la
implementación de políticas adecuadas son elementos clave que afectan la
viabilidad de estos objetivos. No existe una solución única y universal, ya que
cada país tiene su propio contexto y desafíos específicos.
Para avanzar hacia
el uso óptimo de los factores de producción y una distribución justa, se
requiere fortalecer las instituciones, fomentar la participación ciudadana y
buscar un equilibrio entre la eficiencia económica y la equidad social.
Referencias:
1. World Bank. (2019). World Development Report 2019: The Changing Nature of Work. Recuperado de: https://openknowledge.worldban
2. Referencia: Ostry, J. D., Berg, A., & Tsangarides, C. G. (2014). Redistribution, Inequality, and Growth. IMF Staff Discussion Note, SDN/14/02.
3. Acemoglu, D., & Robinson, J. A. (2012). Why
Nations Fail: The Origins of Power, Prosperity, and Poverty. Crown Business.
4. World Bank. (2019). World Development Report
2019: The Changing Nature of Work. Retrieved from: https://openknowledge.worldban
5. Ostry, J. D., Berg, A., & Tsangarides, C.
G. (2014). Redistribution, Inequality, and Growth. IMF Staff Discussion Note,
SDN/14/02. Retrieved from: https://www.imf.org/external/p
6. Piketty, T. (2014). Capital in the Twenty-First
Century. Harvard University Press.
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El drama de las pérdidas territoriales
Buena parte de los conflictos entre los estados, se han derivado de diferencias de carácter territorial.
Con frecuencia en América Latina, muchos sostienen que sus países perdieron enormes extensiones de territorio por la sagacidad de los vecinos, la incompetencia de sus negociadores, el descuido de sus gobiernos o, la parcialidad de jueces y tribunales internacionales.
Lo curioso es que todos afirman lo mismo respecto a sus “voraces” vecinos. En Venezuela durante más de un siglo se ha expresado que, en manos de Colombia, perdieron La Guajira; la zona norte del departamento de Norte de Santander; la ladera occidental de la Serranía de Perijá, incluyendo El Cerrejón, y, la ribera izquierda del río Orinoco. Decenas de mapas se han editado con sus “perdidas territoriales”.
En Colombia se dice lo mismo respecto a Venezuela, aduciendo que totalidad de la Guajira, nos pertenece; que, en el Arauca, la frontera debía ir al norte, por el río Sarare; y que el triángulo conformado por los ríos Negro y Orinoco y el brazo Casiquiare, es de Colombia.
En Ecuador, desde 1916, ha habido indignación porque supuestamente por un tratado “se le entregaron a Colombia”, no solamente los territorios al sur del río Caquetá, sino también parte de los departamentos de Nariño y Cauca, hasta donde llegaba la Audiencia de Quito. El representante del Ecuador en nuestro país, Muñoz Vernaza, que negoció el tratado, fue declarado como traidor a la patria.
En nuestro país se ha comentado que, en ese tratado, perdimos una enorme cantidad de territorio ya que Colombia llegaba hasta el río Napo, afluente del Amazonas por la izquierda, que nace en el volcán Cotopaxi, a 45 kilómetros de Quito.
Con el Perú ni se diga. Se dice allá que los territorios que constituyen los departamentos colombianos de Amazonas y Putumayo, le pertenecían. Al presidente que concertó con Colombia el tratado que en 1922 protocolizó “la cesión”, Augusto Leguía, no solamente se lo consideró traidor a la patria, sino que por eso fue derrocado y enviado a la cárcel del Callao, donde murió de tuberculosis. No se permitió que sus restos se trasladaran a Lima.
En Colombia se dice que nuestro país “entregó” en el citado tratado los territorios comprendidos entre los ríos Putumayo y Amazonas.
En Panamá todavía se lamentan de que la frontera con Colombia no llegara hasta cerca de Bahía Solano, como le correspondía, y que el límite actual le fue impuesto por los Estados Unidos.
Lo mismo se dice en la totalidad de los estados del continente en donde el tema de las pérdidas territoriales, muchas veces ha sido tomado por ciertos personajes para mantenerse en el poder o para atacar a los contrincantes.
El tema siempre es atractivo y no requiere demasiada profundidad por los que lo usan. Todos los estados centroamericanos aducen que fueron despojados por sus vecinos. En América del Sur, basta con preguntar además de Colombia, Ecuador y Perú, en Chile, Bolivia Argentina, Uruguay, Paraguay, Surinam, Guyana y hasta en el gigantesco Brasil. En todos hay mapas a gusto del consumidor.
Los que si resultaron gravemente afectados fueron los mexicanos que en un tratado concertado en 1848 tuvieron que reconocer a los Estados Unidos los territorios de los estados de California, Nevada, Utah, Nuevo México, Texas, Colorado, y Arizona.
Muchas fueron las causas de tan desastrosa situación. Sin embargo, la frase de un mandatario mexicano, Porfirio Díaz, resume todo: “Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de los Estados Unidos”
(*) Excanciller y exembajador de Colombia. Decano de la facultad de estudios internacionales, políticos y urbanos de la universidad del Rosario
Fuente: El autor y https://www.semana.com/opinion
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Definición de "hospital"
Papa
Francisco
PD: Este bello texto fue recomendado a PGV, para socialización, por el abogado Mauricio Morales Jiménez.
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La crisis sin precedentes
que estaría a punto de desatarse por la inteligencia artificial
7, julio, 2023
La llegada de la inteligencia
artificial ha sido un hito importante en el campo de la tecnología y
ha generado un impacto significativo en diversos aspectos de la vida. La IA se refiere a la capacidad de las máquinas de llevar a cabo tareas
que normalmente requieren inteligencia humana, como el reconocimiento de voz,
la toma de decisiones, el aprendizaje y la resolución de problemas.
En los últimos años, se han
podido presenciar avances impresionantes en el desarrollo de la IA. Gracias
al aumento en el poder de procesamiento de las computadoras y al acceso a
grandes cantidades de datos, los algoritmos de IA han mejorado en términos de
precisión y capacidad de realizar tareas complejas. Esto ha llevado a la
integración de la IA en una amplia gama de sectores, incluyendo la medicina, la
automoción, la industria manufacturera, el comercio minorista y muchas otras
áreas.
Arthur C. Clarke aseguró en 1964 que las máquinas
serían más inteligentes que los humanos.© Colin Anderson/Blend Images
Para nadie es un secreto
que la IA ha sido protagonista en los últimos meses. Muchas
compañías y usuarios han sacado hipótesis y “conclusiones” sobre sus
posibilidades; sin embargo, sobre la inteligencia artificial, sobrevuela un
gran mal que parece no tener fin: los derechos de autor.
Así las cosas, hace un par de
días, Steam rechazó un juego por utilizar arte
generado por inteligencia artificial. Cabe destacar que herramientas
como DALL-E, Stable Diffusion o Midjourney utilizan
obras de arte creadas por humanos para entrenarse y, de esa manera, cubrir las
demandas de los usuarios.
En ese orden, esto podría
repercutir en una crisis de derechos de autor sin precedentes
en la industria del videojuego, según señalan los expertos de Ars
Technica. El tema de los derechos de autor es extenso, puesto que los
agentes de IA generativa se nutren de contenido ya creado para elaborar uno
nuevo.
La inteligencia artificial causa temor en el mundo.© Proporcionado
por Semana
AI Dungeon
Este es un buen ejemplo de lo
que puede generar la inteligencia artificial. Antes que nada, este juego
gratuito ofrece a los jugadores la oportunidad de disfrutar de una aventura
conversacional infinita generada a través de la inteligencia
artificial.
AI Dungeon ha estado activo desde 2019, sin embargo,
este juego no ha alcanzado su punto máximo hasta este año. No obstante, durante
este tiempo, sus usuarios han conocido las bondades de la inteligencia
artificial.
Por tal motivo, a raíz de su
éxito, las dudas sobre las posibles infracciones de derechos de autor que
comete no se han hecho esperar.
Video relacionado: Inteligencia artificial y derechos humanos ¿utopía o
paradoja? (Dailymotion)
En el videojuego, los jugadores
pueden crear una aventura con todo tipo de referencias protegidas por derechos
de autor, una alternativa que podría resultar un problema si alguna de estas
deciden ser comercializadas.
Inteligencia artificial lee pensamientos y los
convierte en videos.© Proporcionado por Semana
Por otro lado, los
desarrolladores que utilizan la inteligencia artificial para generar arte
aseguran que al inspirarse en obras ya conocidas, la IA reproducen las mismas,
ignorando los litigios legales que esto conlleva.
Entonces, de acuerdo con lo que
indica Ars Technica, la sucesión de estas acciones podría dar pie a
una crisis sin precedentes por lo dilatadas que son las leyes
relacionadas con inteligencia artificial.
En medio de tanto conflicto, OpenAI busca
remunerar a los autores de los contenidos protegidos con ‘copyright’
OpenAI está trabajando en nuevos
modelos de inteligencia artificial (IA) que, en caso de utilizar contenido
protegido por derechos de autor para su entrenamiento, puedan remunerar a los
titulares de esos derechos.
El director ejecutivo de OpenAI,
Sam Altman, ha participado recientemente en un congreso sobre IA que ha acogido
la Casa Blanca (Estados Unidos), cuya finalidad era conseguir el
compromiso de las grandes empresas detrás de esta tecnología para que sea
seguro ponerla a disposición del público.
En este encuentro, Altman
aseguró que defendía los sistemas de derechos de autor que aseguran que los
autores cobren por el valor que crean. También lo ha defendido en el contexto
de las IA generativas.
En este sentido, y como recogen
en Axios, el directivo ha anticipado que están intentando desarrollar
nuevos modelos “en los que si un sistema de IA está usando tu contenido, o si
está usando tu estilo, te pagan por ello”.
OpenAI trabaja en nuevos modelos de IA que, en caso
de utilizar contenido protegido por derechos de autor, puedan remunerar a los
titulares de esos derechos (foto de Jaap Arriens / NurPhoto vía Getty Images).© Proporcionado
por Semana
Los grandes modelos de lenguaje
que potencian las herramientas de IA generativa utilizan grandes cantidades de
contenidos, muchos de ellos protegidos por derechos de autor, para su
entrenamiento. Esto les permite aprender a generar contenidos nuevos, ya sean
imágenes, videos, texto o música.
Sin embargo, el uso de dichos
contenidos para los entrenamientos no siempre cuenta con la autorización por
parte de quienes sostienen los derechos, como ha denunciado, por ejemplo, Universal
Music Group.
El sello discográfico ya ha
instado a plataformas de música en ‘streaming’ como Apple Music o
Spotify a bloquear el entrenamiento de modelos de IA, debido a que con ello estarían violando los derechos de autor de las
canciones que utilizan.
Asimismo, el pasado enero, un grupo de artistas
demandó a tres compañías dedicadas al arte digital -Stability AI, DeviantArt y
Midjourney- por infringir derechos de autor en el desarrollo de obras
artísticas creadas por IA con la herramienta Stable Difussion.
Fuente: La
crisis sin precedentes que estaría a punto de desatarse por la inteligencia
artificial (msn.com)
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